Aún no me creo el buen arranque que tuvo ayer el nuevo espectáculo. De hecho, empiezo a pensar que el público vino demasiado animado para buscarle una explicación “lógica”. Sí, “lógica”, porque os aseguro que para un cómico no resulta normal meter casi 40 minutos de chistes nuevos y que funcionen casi todos. Es algo muy excepcional y que convirtió el estreno de ayer en el mejor debut de todos mis espectáculos.

Yo, como os digo, no me lo termino de creer y voy a esperar las próximas 2 funciones para celebrarlo. Mientras tanto, me pongo desde ya a limar las cosas que vi que hay que mejorar con el objetivo de que el espectáculo quede perfecto antes de Navidad.