Dados mis continuos viajes, me veo obligado muchos días a comer en estaciones y medios de transporte, por lo que he pensado en añadir a la sección “comida friki” lo que me voy encontrando por ahí. Sin ir más lejos, este jueves, camino de Murcia, fui al vagón restaurante del Altaria y ante la oferta de bocadillos, me decanté por el de Lomo con Queso que costaba 4,20 euros. ¡Qué timo! De primeras, no penséis que os lo preparan como en los bares, no. Ya los traen hechos y lo único que hacen es calentarlos dos minutos en un horno. Y esto sería lo de menos de no ser por el contenido del bocadillo; una lámina de lomo del grosor de una tarjeta de crédito con un par de tranchettes ¿Conclusión? Que almorcé un trozo de pan caliente con algún “tropezón” en su interior. El próximo día pido el de tortilla.