Hoy se cumple un año del estreno de “100 maneras de parecer imbécil”. Sin duda, el espectáculo que más problemas me ha dado hasta su puesta a punto. Y es que, desde su preestreno en agosto de 2012, ha sufrido cambios en casi el 80% de su guión, tuve que cambiar de título, de cartel,… Ah, sin olvidarme de la persona encargada de las luces y sonido, que tuve que cambiar hasta 3 veces por circunstancias de toda índole. En definitiva, un monólogo que me ha hecho sufrir pero cuyo estupendo resultado final me hace ver que mereció sin duda la pena.